Estamos en Semana Santa. Época llena de rituales, tradiciones y por supuesto, de muchas flores y plantas. Algunas destacan por encima de las demás, ya que su uso está muy extendido en estas fechas. Es el caso de las ramas de olivo, laurel y como no, el Romero.

La Salvia rosmarinus (nombre oficial del romero)  

es nuestro protagonista hoy. El romero ha estado cargado de simbolismo desde la antigüedad. Se sabe que los Griegos se hacían coronas con sus ramas antes de los exámenes a fin de mejorar su memoria. Y que los Romanos lo usaban como ofrenda a sus dioses, quemándolo en sus rituales para purificar el hogar.
Todas estas costumbres, que a priori podrían tacharse de supersticiones, no dejan de tener mucho sentido. Hoy por hoy se sabe que el romero es un potenciador de la memoria y la concentración.
Además de un potentísimo antibiótico natural. Siendo asimismo, ideal consumido en infusión para favorecer y aliviar problemas de digestión.

Pero yo quiero pararme en sus propiedades para la salud de nuestro cabello. El romero es el ingrediente ideal en cualquier fórmula que vaya dirigida a cuidar nuestra melena.
Sus propiedades para mejorar la salud de nuestro cabello no son pocas:

• Estimula el crecimiento capilar.
• Frena la caída.
• Disminuye el aspecto de las canas.
• Evita la caspa y el exceso de grasa del cabello.
• Es un acondicionador natural.
• Aporta brillo y elasticidad al pelo.

Particularmente, lo utilizo siempre en todas mis elaboraciones capilares, ya que nunca decepciona. Si tu también quieres aprovecharte de todos los beneficios que esta maravillosa planta puede proporcionarte, no lo dudes, usa velas o incienso de romero, bebe infusiones de romero, usala como especie en todos tus platos ya que es un condimento muy sabroso y sobre todo, usa champús y acondicionadores que contengan romero. Te puedo asegurar que tu melena te lo agradecerá.